To Watch the Storm
Steve Hackett
Camino Records - 2003
Los
que tuvimos la suerte de ver en vivo a Steve Hackett con su nueva banda
en 2001 (ver Mellotron 30), presentíamos que un nuevo disco con esta
formación debería ser un trabajo significativo en su carrera. La versatilidad
de los músicos funcionaba muy bien con la amplitud estilística que Hackett
insinuaba con los dos nuevos temas presentados en esos shows, "Mechanical
Bride" y "Serpentine Song". Ambos evidenciaban algo
que se venía observando en discos como Darktown, y era que
Hackett estaba mentalmente más cerca de la experimentación de King Crimson que
del sinfonismo clásico de Genesis. Sus continuas colaboraciones junto a Ian
McDonald (cofundador de la banda de Fripp) y la noticia de que reemplazaría
a Fripp en una posible reunión de gran parte de la formación original
de Crimson ponía en evidencia esta tendencia en Hackett.
Y el resultado plasmado en To Watch the Storms confirma esta
sospecha, ya que amplía los horizontes estilísticos de Hackett de una manera
asombrosa. Es cierto que Darktown poseía un eclecticismo notable, pero
eso se acentuaba por el hecho de ser los temas grabados a lo largo de un período
prolongado, sin tener una banda estable. No es así el caso del nuevo álbum, ya
que la misma banda interpreta todas las piezas. Estas muestran hermosos y
delicados temas acústicos como el bellísimo "Strutton
Ground", donde apreciamos quizás el mejor trabajo vocal de Hackett de
los últimos tiempos, "Wind, Sand, Stars", con un pasaje
excelente de piano a cargo de Roger King, "This World",
un melancólico tema de gran emotividad, "Rebecca", una pieza
de increíble delicadeza, o "The Moon Under Water", una pieza
de guitarra clásica con inspiración renacentista que deriva en el magnífico
cierre con el majestuoso y bellísimo "Serpentine Song", una
especie de "I Talk to the Wind" (Crimson) del siglo XXI.
Por otra parte hay una serie de piezas de gran tensión, como el cover de Thomas
Dolby (de Gothic) "The Devil is an Englishman", con
una vocalización siniestra de Hackett que remite a "Vampire...",
la jazzística y oscura "Frozen Statues", la nombrada
psicodelia de "Mechanical Bride" o el clima oriental de "The
Silk Road", una pieza que podría haber sido incluída perfectamente en
el Passion de Peter Gabriel.
La faceta más irónica y humorística de Steve Hackett se pone de manifiesto en
"Circus of Becoming", cuyo solemne comienzo se convierte en una
especie de rag juguetón a lo "Ballad of the Decomposing Man" (Spectral
Mornings), para explotar en un majestuoso aunque efímero solo de
guitarra, y en "Come Away", que comienza con aplausos y ritmo
de mazurka, un estilo de Europa Oriental, incluyendo flautas, panderetas, y
sonidos festivos que otorgan un tono liviano a un tema poco trascendente en el
contexto de un gran álbum.
Un detalle formidable del disco es la cantidad de matices que tienen los sonidos
utilizados, y los continuos cambios y giros de los temas. Los ritmos se aceleran
en momentos inesperados, las guitarras entran y desaparecen por sorpresa,
la percusión y las texturas de los teclados ofrecen infinitos recursos para
sorprender al oyente en todo momento, creando así un trabajo de enorme
complejidad y elaboración, que puede encontrarse entre lo mejor de la discografía
de Hackett. Incluso el trabajo en voces tanto de Hackett como de los miembros
del grupo es sin dudas el mejor de todos sus discos, ya que este nunca había
sido el fuerte de Hackett. Evidentemente encontró el tono ideal en estos temas
y la sofisticación de los inteligentes arreglos hace que cada canción tenga su
propia identidad.
To Watch the Storms no es el anunciado regreso a los primeros
cuatro discos de Hackett que se venía suponiendo. Difícilmente Hackett intente
repetir fórmulas para cautivar a su público, sino que a través de potenciar
sus virtudes -sobre todo su imaginación compositiva, su buen gusto para los
arreglos y su increíble capacidad técnica en su instrumento- permita al oyente
participar activamente en el apasionante viaje que es su infatigable búsqueda
artística.
Andrés
Valle
Steve Hackett
voces,
guitarras
Roger King
teclados
Rob
Townsend
vientos
Terry
Gregory
bajos,
voces
Gary
O¹Toole
batería,
voces
John Hackett
Fluflauta
en Serpentine Song
Ian
McDonald
saxo
en Brand New
Jeanne
Downs coros
Sarah Wilson Cello
Howard
Gott Violin
Temas
1.
Strutton
Ground
2.
Circus of Becoming
3.
The Devil Is An Englishman
4.
Frozen Statues
5.
Mechanical Bride
6.
Wind, Sand and Stars
7.
Brand New
8.
This World
9.
Rebecca
10.
The Silk Road
11.
Come Away
12.
The Moon Under Water
13.
Serpentine
Song