Alejandro Matos. En Vivo en El Emergente.
Bs. As., Sábado 02/07/2016. 21 Hs.
Por Hugo Lagar
Ficha
técnica
Músicos:
Alejandro Matos (Voz Y
Guitarras + Programaciones) - Javier García Atencio (Batería) Y Andrés
Zadunaisky (Bajo).
Set-List:
Escindido - Cazadioses - Potestades - Angel - Anclas - Lo Velado - La Construcción
Del Desierto - Lamento Final.
Crónica
Por
primera vez, en este año 2016, Alejandro y su banda subieron al escenario este
lluvioso sábado 2 de julio en el emergente bar, con el objetivo de presentar
formalmente su más reciente álbum solista, titulado “la potestad”. Cierto
es que, en La Plata Prog Festival 2015, ya tuvimos una especie de
“pre-estreno” ya que nos ofreció un set de tres temas (incluyendo la suite
“pertenencia” de casi veinticinco minutos), en aquella memorable apertura
del viernes 4 de septiembre 2015 y con el álbum aún sin editar. Pero en esta
ocasión fue la presentación oficial del álbum, hecho destacado en sus
contados diálogos con el público asistente que tuvo Alejandro.
La
propuesta fue simple y sencilla: pura música, a cargo de un power trío, con
Alejandro comandando las programaciones para las contados momentos (en ciertas
canciones) en que era necesario reproducir voces, partes de piano y teclados, y
demás efectos, para escuchar. No se requirió de una gran puesta de luces,
coreografías ni hacer gala de proyecciones. Como lo he escrito: pura música a
lo largo de casi cincuenta minutos que duró su set, en el marco de una fecha
con otros grupos también agendados para tocar.
El
show arrancó con una versión abreviada del track de apertura del disco
“Escindido”; lo cual es algo lógico y adaptado al tipo de formación que se
estaba presentando. Luego, el trío dio rienda suelta a la ejecución de un
repertorio nunca antes tocado (salvo dos canciones que sí ejecutaron el año
pasado en la Plata Prog festival, día 1). Ciertamente, la fórmula de trío
adoptada tuvo sus ventajas dado el carácter expansivo que le otorga a sus
protagonistas en la interpretación de canciones cuyas versiones de estudio
cuentas con detalles sutiles y arreglos que, aquí, fueron sabiamente cubiertos
por la pericia de Alejandro y Andrés principalmente en sus instrumentos:
reemplazaron bien los solos de bandoneón (“Potestades”) y clarinete (en
“Lo Velado” por la guitarra y el bajo respectivamente. Hasta hubo espacio
para ofrecer una buena versión de “ángel”, incluyendo vía sampler el diálogo
entre Alejandro y su hijo Ulises. De hecho, debo decir que las versiones en vivo
de “Cazadioses”, “Anclas” y “la construcción del desierto” nos
volaron las cabezas literalmente, sonando mucho más potentes y con una soltura
no percibida así en el estudio.
Siendo
un tipo de palabra profunda, llama la atención que -a la hora de comunicarse
con el público- Alejandro haya optado por resultar muy directo, “cortito y al
pié”, ateniéndose a transmitir sólo lo necesario y agradecer a varias
personas (presentes o no en el recinto). La voz era un aspecto que lo tenía
preocupado en la previa (algo que me había confesado); y, sin embargo, cantó
excelente (como si estuviéramos escuchando el álbum). También hay que
destacar que el lugar ofrece un muy buen sonido; y así lo sintieron él y sus músicos,
arriba del escenario, como lo ha manifestado en su perfil.
Como
puede leerse en el set-list, la suite “pertenencia” no pudo ser de la
partida en la oficial presentación. Y Alejandro
Matos lo aclaró en un post de su perfil días más tarde: excedía la
duración del set pactada para tocar y sumado el hecho que ese sábado -pese a
lo lluvioso- había muchas bandas para tocar. Por eso es que decidió cerrar con
“lamento final”, un tema que ha destinado al álbum compilado “Gigantología
Y así se presentó en sociedad “La Potestad”, ante un auditorio que llenó el Emergente Bar, con el protagonista agradeciendo a familiares, colegas y amigos que le hicieron “el aguante necesario en una noche muy poco favorable”.
Desde el lado sur del cielo
19 de julio del 2016.