2112 y Quaker
Segundo Encuentro Progresivo 2005
Sábado 7 De Mayo – 21 Hs. Teatro I. F. T. –
Buenos Aires- Argentina
Por Jorge "Big Bang" Ingenieros
Noche de sábado en Buenos Aires, las brillantes luces de
la avenida cortaban el frío que envolvía a la ciudad. Todos se quejaban que
los había sorprendido, pero que querían que el calor del verano acaso se
quedara para siempre. Enfunde mis manos en los bolsillos y me encamine hacia el
teatro guiado por la memoria y recordando los anticipos de Daniel (Sperlungo).
Es que no puede uno evitar imaginar lo que vendrá y si bien tenia una idea del
sonido que podría tener 2112, no conseguía
adivinar cual seria el de Quaker.
Mas buenos que la avena...
21 horas...puntual era la muletilla que mandamos toda la
semana...en fin nuestra bendita idiosincrasia...derrumba las convicciones mas sólidas
de cualquier organizador...que publico impuntual...tanto que hasta diría que es
infiel.
Previa para un
video de Rush mientras se espera a los remolones que ni siquiera muestran vergüenza
cuando entran apurados...
Abre el telón y allí están los Quakeros, un line-up
interesante pero, que veo, estos chicos tienen tan poca edad que me mueve a
pensar que son una banda de escuela secundaria y por lo que leo en el programa
ni siquiera tienen un disco editado. Pero que encuentro progresivo de jardín de
infantes han organizado. La cosa cambia radicalmente cuando empiezan a tocar. Me
tengo que comer el prejuzge . Se trata de un sonido compacto, preciso, ajustado,
con cortes, quiebres, cambios, aristas filosas como un bisturí.
Me asombra la habilidad que tienen con los instrumentos,
aprendieron rápido pero se ve aprendieron bien. Dos guitarras que se
complementan, a ver rápido Felipe sin repetir y sin soplar, bandas con dos
guitarras emblemáticas: los beatles, los rolling, pero no esas son primeras y
segundas, otra: Wishbone Ash...bien bien Felipe..Pero esto no, es otra cosa,
recuesto mi cabeza y cierro los ojos, trato que la música me transporte, que me
lleve a otros lugares, a otros espacios, no obstante no, es inútil, la música
emana y se queda allí, se desparrama por el escenario a medida que se suceden
los temas. La gente aplaude, ahh..Les gusta...a mi también, me seduce, esto es
distinto, es algo que no he escuchado así nomás. Trato de descubrir los
sonidos crimsonianos que pesan en los antecedentes de estos muchachitos. Trato
de figurarme a un Crimson de pre-universitaria tocando por primera vez pero aun
así no, estos niños hacen algo que suena como una banda cohesionada, como si
tuvieran años de escenario, logran un sonido por demás sorprendente. De
repente llego a una alarmante
conclusión, las notas flotan pero se diluyen y se escapan de mi cabeza, no
puedo retenerlas. Cada fraseo despierta en mi placenteras sensaciones que no se
quedan. Las melodías se van y las reemplaza una nueva que me hace olvidar la
anterior, que desastre ...es que no voy a poder contar lo que escuche, como voy
a hacer para describirlo, la desesperación me invade, pero saben, la verdad no
me importa por que me apasiona no saber lo que vendrá. Eso es el secreto, esa
es la clave de la música de Quaker. Creo haber descubierto el juego, solo que
como es un juego no se el final. Tan buena como la avena es la sensación que
despierta en mi cada fragmento de la música de esta banda. Cuando el encore
termino me quede meditando en el asiento sin poder ordenar mis ideas. Andrés
(Valle) me sobresalta. –¿Y Negro..que te pareció?. –Muy bueno, realmente
muy bueno...entonces me cayo la ficha que faltaba...para volver
a sentir lo mismo los tendría que volver a ver de nuevo. ¿Saben que?
No me queda la duda que cuando eso suceda, así será.
Pausa y luego el numerito...
Viene el video de King Crimson, que linda, que rara es su música
tan soberbia como la anterior, quizás por eso las comparaciones...
2112 es un Power Trío a la manera clásica, de guitarra,
bajo y batería. Tan clásico como eficiente, con mucho escenario de verdad y
con poses que ni siquiera necesitan ensayarse, nada puede retrotraer a sugerir
siquiera que empiezan, parece que hubieran estado allí desde siempre.
Instrumentalmente poderosos como todo trío que se vale de lo que tiene para
vibrar, se ven perjudicados por la falta de volumen en la guitarra, cosa que se
advierte hasta desde el mismo escenario. No obstante las correcciones
solicitadas por los músicos tardan en surtir efecto y eso los deteriora
notablemente. Las canciones pasan, el son no varia demasiado, empiezo a
acostumbrarme un poco hasta diría. Sin embargo la performance de la banda crece
según pasan los minutos. Por que crece, por la ejecución de sus
instrumentistas, pero sinceramente podrían pasar de la parte vocal.
Monopolizada por su guitarrista , Juan Tambussi, la voz no ayuda en lo absoluto.
Es mas pone en evidencia la falta de coros adecuados y la necesidad de agregar
algún teclado por allí. La banda tiene un buen dialogo con el
publico, incluso a punto de organizar un sorteo de sus propios trabajos
editados, son algo como mas de tres, para retribuirle favores. Lo que cabe
preguntarse es por que se ratearon tanto sus seguidores justo hoy que tocan en
el centro y cuando digamos tienen una oportunidad trascendente. Cosas de amantes
infieles que son difíciles de explicar. Viene el bis y es broche de oro en
cuanto a ejecución refiere, impecable Juan en su guitarra que ahora suena
mejor, tan bien como para hacerla deslizar sonando sola por el piso del
escenario. Bajo y batería en su lugar sin desviarse un centímetro.
Salida a la noche, Buenos Aires esta somnolienta y se ha
conmovido un poco con 2112, quizás merecía mas. Mientras buscamos algo para
comer nos ocuparemos de la critica a un encuentro progresivo que tal vez haya
pasado un poco desapercibido pero que tiene una valiosa utilidad, como una
cierta transición que trae el crecimiento.
Jorge Ingegnieros