Entrevista a Espíritu 

Entrevista en  El Retorno del Gigante

Entrevista difundida en el Programa 140  – 12 / 05 /2003

¿Como definen Fronteras Mágicas?

Osvaldo Favrot: Muchos personas que han escuchado el disco y conocen a la banda desde siempre, que han escuchado los cinco discos anteriores, opinan que está entre los mejores trabajos del grupo, que está más cerca de los primeros discos que de los últimos. La gente que ama al grupo está contenta con este material, que era la prueba de fuego, porque hay nuevos integrantes, Ernesto Romeo en teclados, Horacio Ardiles en batería, el cantante (y actor) es Pablo Guglielmino, y en el bajo está mi hijo Federico Favrot.

En una charla anterior nos decías que estabas buscando un cantante adecuado y que tenga algo que ver con Berge

OF: Si se fue dando naturalmente, el cantante era un tema complicado, porque no todos se prestan a este tipo de música, incluso probamos hasta tenores del Colón, pero Pablo se adaptó muy bien a todo el material

Ernesto (Romero) ¿Cuáles son tus influencias, como te conectás con Espíritu?

Ernesto Romeo: Yo conozco la música de Espíritu desde los 18 años, indagando en el rock sinfónico en general y argentino en particular, que en la década del ochenta no estaba precisamente de moda, por eso buscar todo sobre rock progresivo y la música electrónica que era lo que a mí mas me gustaba, era complicado de conseguir. Además recién se estaba difundiendo el compac disc y lo que salía poco tenía que ver con esto, era complicado encontrar esta música a excepción de Génesis, Yes, Emerson Lake & Palmer, o Pink Floyd y que tampoco era tan fácil de conseguir. Y por leer revistas como el Expreso Imaginario me topé con bandas como Espíritu, con lo cual me puse a indagar y me hice con sus discos, que realmente me gustaban mucho, y en especial su desarrollo instrumental de la música que era algo inédito para el rock argentino. Aunque a mí particularmente siempre me gustó el desarrollo de los teclados del rock nacional. Creo que los teclados de aquí tienen un sonido particular que no se encuentra en otras músicas y la forma en que se utilizaron los instrumentos electrónicos. Y dentro de esa perspectiva creo que Espíritu tenía una cohesión musical muy particular, y además individualidades muy notables como músicos, y comparado con otras bandas también tiene un sonido muy propio, Alas tenía su sonido, Crucis el suyo, MIA otro, y Espíritu el suyo, yo en definitiva llegué a Espíritu por su música. Luego, yo empecé a hacer música por el sintetizador y todas las posibilidades de la música electrónica, por un lado mis influencias tienen que ver con eso, y por otro con el rock progresivo, combiné ambas cosas. Si bien yo fundé una banda de música electrónica, Klaus, se la vincula como una banda que tiene que ver con el progresivo, integré otras bandas de rock sinfónico y conocí a Osvaldo ya hace dos años por un amigo en común y desde allí estamos trabajando juntos.

OF: Con Ernesto empezamos a trabajar hace dos años y luego se fueron incorporando el resto de los músicos.

¿Qué hizo que se encendiera la llama para volver a formar Espíritu?

OF: Te vas a reir, pero Carlos Goler (Ex baterista del grupo en los primeros discos) y yo mantenemos una amistad, y un día me dio unas entrada para ver a Rick Wakeman hace como dos años, y lo fui a ver y me dije ¿porqué nosotros no podemos volver? Y en ese show también tocó el stockista Guillermo Cides, lo llamo para ver si quería tocar el stick con nosotros, por no podía porque tenía proyectos en España, así que me recomendó a otro stickista que fue quien me presentó a Ernesto.

¿Ya en ese momento pensabas reunir a Espíritu o querías hacer otro proyecto de este tipo de música?

OF: Espíritu fue siempre para mí parte de mi vida, y no puedo entender hacer música y que no sea Espíritu, me costaría armar otro grupo con otro nombre, porque saldría la música de Espíritu. Ya me pasó en su momento hacer otra banda que se llamó “Aspid” o en otro momento con Bergé armamos un proyecto llamado “S. O. S”, y sonaba a Espíritu siempre, no tenía sentido. Trato de ser coherente con la música que siempre hice. Yo defendí el progresivo en las épocas en que se hablaba mal de él, otros no. Lo defendí cuando la gente lo seguía y cuando no. Así que dije sigo con el grupo.

¿ La idea es seguir con Espíritu en el futuro?

OF: Justamente, la idea es seguir y graba un nuevo disco el año próximo

Respecto a la temática de las letras, en los setentas la temática era espiritual, en cambio ahora la tendencia es más terrenal, y paso en grupos como Espíritu y en nuevos grupos como Omnia por ejemplo, ¿a que pensás que se debe esa evolución?

OF: En la década del setenta era un movimiento generalizado adonde la mayoría de la gente buscaba caminos espirituales, el más allá, la eternidad y demás, por tanto la música volcaba en sus letras esa temática. Hoy por hoy hablar de un tema que ya ha sido escuchado y cantado de muchas formas no es lógico, además hay tantas cosas para decir de lo que ahora está pasando en el mundo, en nuestro país... además nada tiene que ver lo que pasaba en la década del setenta con lo que pasa ahora. Hemos chocado con la realidad y hay que hablar de eso

Fijate que Yes hoy habla de temas cotidianos, que en los setenta era inusual para la temática del grupo.

ER: Había un entorno cultural e ideológico en las décadas del sesenta y setenta que cambió mucho en la actualidad, y esta visión contemporánea es empezar de nuevo a partir de nuevas problemáticas, lo que hablaban las letras de Espíritu en los setenta tenía que ver con esa problemática

¿Es difícil compartir un mismo espacio, desde lo creativo y compositivo con una persona como Osvaldo que es un músico reconocido y consagrado?

ER: para mí se dio de una manera muy natural, él es el hilo conductor, y a pesar que yo no me integré al grupo pretendiendo componer sino porque comparto las idea musicales y el proyecto, pensando que podía hacer un aporte a la música de Espíritu que yo conocía, pero acercándome desde un lado diferente. Mi perfil de tecladista no es el clásico de rock sinfónico, y pensé que podía aportar desde mi sonoridad, de un estilo distinto aunque compatible, que tenga una continuidad con el sonido anterior del grupo. Por Espíritu han pasado grandes tecladistas que han dejado una importante marca, Fedel, Fogliatta y Mahler tienen cada uno un sonido muy particular y hay además un sonido de grupo que me gusta y que trato de crear como un puente entre eso y mi sonido. 

Osvaldo ¿Cómo ves hoy a “Crisálida” y “Libre y Natural”?

OF: Y esos discos son parte de mi vida, fueron como otros hijos que tuve, los escucho, hoy más porque hay que tocarlos, y me da placer y no puedo creer como están tocados, como se ha grabado eso en cuatro canales y en esas condiciones, hasta me cuesta a veces que yo estoy tocando ahí.

¿Les resultó fácil llegar hoy al sonido ese que tenía Espíritu en esos discos?

OF: No para nada, te repito es un material que no puedo hoy creer como se grabó en esa época, que treinta años después cuesta sacarlo con toda la tecnología a favor, en ese momento no había computadoras...¡no había nada! Tuvimos que ensayar muchísimo para poder tocarlo.

Además hay una gran avidez en el exterior, en festivales internacionales, por las grandes bandas progresivas argentinas como Espíritu, ¿sabían?

OF: si, no lo podía creer, pero por Internet ves que Espíritu está considerado en Inglaterra, en rankings junto a Zappa a Yes, y pensaba porqué aquí no.

Hay una cuestión histórica me gustaría que aclares, resulta que hay un tema de Espíritu editado en un disco que no se llama así, ¿verdad?

OF: Si, hay un tema en una recopilación de rock nacional, editado como “Hoy Siempre Hoy”, y en realidad ese tema se llama “Soy La Noche”, que es un tema de los más bonitos de la primera época de la banda, así que todo el mundo lo conoce con otro título.

Otra buena noticia fue la reciente edición por primera vez en Argentina en CD del tercer disco de Espíritu, el de tapa negra

OF: Si, estamos muy contentos, un muy buen trabajo del sello Viajero Inmóvil, se ha remasterizado, tiene una muy linda presentación, se han agregado tres temas de “Obras en Vivo”, así que esperamos que la gente lo pueda disfrutar con un buen sonido.

Además se edita por primera vez respetando el trabajo como ustedes lo concibieron, en el orden de los temas y la gráfica, porque hubo una edición brasileña en los noventa que no lo hizo ¿verdad? 

OF: si, hubo una edición brasileña para el mundo hace siete u ocho años, que no respetó el orden de los temas, ni el arte original. Por eso estoy muy contento con esta edición que respeta lo que fue el disco en su momento, y remasterizado.

¿Cómo estaba Espíritu cuando grabaron y sacaron este álbum, como era el contexto?

OF: este era el tercer álbum del grupo, se grabó en 1981, y se presentó en Obras en junio de 1982, quisimos tener la formación original, no se pudo, y entraron en ese momento Angel Malher en teclados que hoy es un reconocido director de orquesta y autor de comedias musicales, Fito Mesina en batería que hoy en día es un reconocido profesor, Claudio Ciccercia en bajo junto a Fernando Bergé el cantante original y yo. Empezó todo muy bien pero en aquel momento no sabíamos que Argentina iba a entrar a la guerra de Malvinas, así que toda la edición tiene esa problemática, incluso la presentación en vivo también, un par de días antes había venido el Papa y se habían suspendido los espectáculos, incluso lo reflejamos en la tapa del disco, con ese fondo negro y las caras en parte tapadas que tiene que ver con ese momento.

Y fue muy importante y muy sinfónico el aporte de Mahler en ese disco

OF: Si, Angel después siguió su carrera componiendo música para diversos artistas, pero luego se volcó a lo sinfónico orquestal con musicales como “Drácula” o “El Jorobado de París”, con una base clásica muy importante. Angel en el momento del disco era muy joven como Fito y Claudio y con esa edad subieron al estadio de Obras y la rompieron.